miércoles, 20 de febrero de 2013

Carta de reflexión.

Unos van y otros vienen, y la fugacidad con la que esto sucede es impresionante. A lo largo de nuestra vida cruzamos más de un millón de miradas con gente totalmente desconocida, y, cada una, con su propia historia que contar.

Pero esta no voy a ser otro sinó yo mismo el que va a intentar narrar, o resumir, todo lo que está pasando por su cabeza ahora mismo. Ya no procuro que sea una entrada buena o mala, que guste o no guste, únicamente necesito desahogarme. ¿Sabéis? La música que le puse a este blog es de lo que mejor funciona cuando uno quiere relajarse, reflexionar y escribir.

Hace ya 50 días que dejamos atrás el año 2012. Querría haber hablado sobre ello antes... pero yo soy especial. Sinceramente, a mí se me hizo corto, muy corto, 2012. Si cierro los ojos, todavía recuerdo como si ayer fuera 17 de Febrero del año pasado. Fechas como esa no las olvidaré. ¿Por qué? Por Hachi. Ese acontecimiento fue lo que más me hizo cambiar a lo largo de todo el año. Descubrí un mundo totalmente nuevo para mí... en el cual era demasiado inexperto, y en el todavía me queda mucho por aprender. Demasiados recuerdos y sensaciones acumuladas, que en su momento explicaré. Pero si más no, quiero GRITARLE al mundo y darle las gracias a toda esa serie de acontecimientos que me hicieron crecer como persona, tanto en lo bueno como en lo malo. Hachiko, si no te hubiera conocido, ahora mismo no estaría escribiendo estas palabras. Gracias.

Pero el año no acabó ahí, más bien sólo estaba empezando. Que por Mayo, era por Mayo, cuando sin que ninguno de los dos lo pensaramos, apareció L. Gracias a L conseguí olvidar todo lo malo sucedido anteriormente, a partir de ese momento todo iría viento en popa. Y así fue. Gracias a L pude aprender a descifrar la verdad del interior de las personas con tan solo sus palabras, me hizo crecer aún más. Creo que te he dicho todo lo que te tenía que decir, y desde aquí, si estás leyendo esto, sólo puedo darte las gracias.

Aunque mi año fue algo más que dos personas. Viajé a Mallorca con mi clase, de fin de curso, viaje el cual será bastante difícil de olvidar. ¿Una de las razones? Allí pude ver y pasar una tarde con Sophie. Aunque parezca que no, le tengo demasiado aprecio. Fue, si no la primera, de las primeras personas con las que hablé y conocí en twitter. Y después de más de año y medio, aquí seguimos, Soft.

Hubo cambios, muchos cambios. Tras muchas guerras y debates, finalmente conseguí quedar con un grupo de amigos para ir a Barcelona a pasar la tarde. Primero vino la quedada dickstroyers, épica cuanto menos. Aunque el mejor plato fue el que vino después. Asistí a mi primera quedada twittera.

FRAN, MARÍA, ESTHER, MARTA, JESÚS, PAT, XANTAL, ANAÏS, MARÍA, CLAUDIA, CARLA, NAT. Y VOSOTROS, LOS TWITTEROS Y LOS BARNATWITTEROS. Gracias por haber compartido algún momento de vuestro año conmigo.

Y sin duda alguna, no podría resumir todo un año en sí en una sola entrada de un cutreblog, todo lo que puedo poner por aquí, es que, a final de este año, me he dado cuenta de que he cambiado, he crecido.

---------
Cuando un grupo de amigos se reúne una tarde cualquiera, nunca sabes lo que va a pasar, pero sabes que lo vas a pasar con ellos, y, por lo tanto, feliz.

Ahora es el turno de hablar de las quedadas twitteras. Es gracioso, porque llevo desde el 26 de Junio de 2011 en twitter y hasta Septiembre del año pasado no sabía nada de ellas. Parece ser, que cuando yo llegué el grupo ya estaba formado. Al principio iba con miedo. ¿Caería bien? ¿No caería bien? ¿Encajaría? ¿Cómo sería el resto de gente que iba a ir? Mi cabeza era un mar de dudas. Tuve suerte, pues iba con un amigo y él se encargó de... digamos que me orientó, de alguna forma. Llegamos tarde, como de costumbre. Había mogollón de gente... me imaginaba un grupito numeroso, pero no aquello. Podría contar... ¿unas 50 personas? Todos parecían buena gente.

Me quedé detrás de mi amigo, mientras él saludaba a todos los que conocía, yo intentaba presentarme, al menos. Una vez etuvimos todos, nos guiaron hasta la plaza del MACBA, que pareció ser el lugar donde se reunían todas las tardes. Una vez allí, cada uno se quedó junto a la gente con la que mejor se llevaba. ¿Yo? Al principio no sabía qué hacer. No conocía nadie, y como ya sabréis, soy demasiado tímido e inseguro. Pero en ese momento, aparecio Nat. Era la única a la que conocía desde antes de ir a una quedada, y se encargó personalmente de presentarme a las 50 personas, una a una. Gracias a ella, pude entablar conversación con un pequeño grupito que estaba en pie: Kazu, Eli y Nata. Fue con los que más hablé en toda la tarde. 
Llegaron las 8 y media, y me tuve que volver a casa. Había pasado una de las mejores tardes de verano. Desde ese mismo día, decidí que Macba sería mi pequeño trocito de paraíso.

Y así ha sido hasta la fecha. Aún con sus altos y sus bajos, unas mejores que otras, las quedadas son el único lugar en el que me encuentro a gusto. La mayoría del tiempo todo son risas, bromas y alegrías. Conforme pasan las semanas, voy conociendo a más gente. Ahora soy uno de los integrantes del grupo. Y me encanta invitar a los nuevos a que vengan, a que se dejen la vergüenza y la timidez en casa, y se acerquen a conocer a las mejores personas que hay por tierras catalanas.

---------

Pero no todo siempre es de color de rosa, como dicen. Últimamente pocas cosas funcionan como a mí me gustaría. Los estudios no van bien. El sentimiento de compañía no va bien. Las chicas no van bien. Las relaciones entre personas en las quedadas no van bien. 


En este momento de mi vida es cuando me pregunto: ¿Para qué he venido aquí?
Si no puedo ayudar a las personas que me importan, si no soy lo suficientemente inteligente, si me siento completamente solo cuando más necesito a alguien a mi lado... ¿Por qué estoy aquí?

No lo sé. Muchas veces pienso en cómo sería la vida de las personas que conozco si yo desapareciese o no hubiese venido nunca. ¿Seguiría igual? Son preguntas sin respuesta.

------------

¿Que qué le pido a este 2013? Sencillo: que todo a mi alrededor vaya mejor que en 2012 pero peor que en 2014. Que, por una vez, las cosas funcionen bien. A este 2013 le pido ser feliz.

V.

1 comentario:

  1. Que puedo decirte más que, como ya sabes, estoy aquí para lo que sea. Me alegra haber contribuido de alguna manera en tu persona, porque eres un chico increíble por el que me siento afortunada de conocer y querer, porque sí, te quiero, y no poco. ¿Que por qué estás aquí? Yo te lo diré. Para hacer felices a muchas personas. Tú me ayudaste cuando estaba mal, me sacaste sonrisas, hiciste que la distancia no fuese más que una piedrecita sin importancia, y nunca olvidaré todo eso. Quisiera darte las gracias por todo, y pedirte un favor. Nunca perdamos el contacto, porque prometí que te vería y así va a ser.

    PD: Me gushta la música, babe.

    ResponderEliminar